La filosofía de la negación

Post publicado en el blog de control de castidad para mujeres.

Tener un hombre negado no es tan fácil como tenerlo permitiendo que llegue repetidamente al orgasmo, es una disciplina, un ejercicio, una habilidad, , y sobre todo es sobre el equilibrio de poder . El sexo es agradable, correrse es una buena sensación. Pero tener un hombre negado es eufórico.
El estado de excitación que siente siendo negado una y otra vez, día tras día, semana tras semana, mes tras mes, difícilmente puede ser descrito de alguna manera, es vivirlo y disfrutar precisamente de la contradicción de lo frustrante que es eso.
No todo el mundo puede manejar esta euforia, y hay hombres que no desean nada más que correrse. Tener una persona dispuesta a aceptar la negación es sólo un pequeño ejemplo del placer intenso se puede llegar a ser.
Al igual que muchas cosas placenteras en la vida, el viaje es mejor que el llegar al destino.
Cada borde sólo le hace tenerla más dura, más sensible, y más en un estado de felicidad y frustración.

Algunas personas consideran que el sentimiento es como un trance y puede ser un proceso hipnótico, uno tiene mucho control sobre su "víctima" si puede lograrlo.
Permitirle a alguien que lo lleve a un estado similar a aquel en el que es tan vulnerable y sensible es algo especial y no debe ser subestimado.
 Mi marido me mostró esto y me dijo que describe su sentimiento de burlas y negación perfectamente.
 Ahora estoy empezando a entender por qué él ama tanto la negación, y preferiría que no le dejara correrse tan a menudo.