Consulta.

S.H. Escribió: "Me pregunto si le debo hablar a mi novia acerca de ponerme un dispositivo de castidad. Ella tiene gusto muy tradicional (le hablé con ella sobre el pegging cuando comenzamos a salir hace 3 años, y no es una cosa que le hace ninguna ilusión hacer). 
Tengo diversos motivos para estar en castidad. En primer lugar, por mi trabajo tengo que viajar mucho, y así me quitaría cualquier tentación. En segundo lugar, me excita saber que ella tiene el control de esta manera . Y la principal es que me masturbo mucho, a veces 3-4 veces al día. Con mi novia apenas tengo relaciones sexuales porque creo que mi deseo desaparece. ¿Cómo puedo plantear esto y no hacer que sea incómodo después de casi 4 años saliendo? ".
Respuesta:

El hecho de que tener pocas relaciones sexuales con su pareja "tal vez sea a que ella tampoco esté muy excitada sexualmete contigo". Tú me cuentas que deseas tener puesta la jaula, porqué según me pareció entender estás interesado por varios motivos. Deseas sentir la sumisión a otra persona, y ese control crees que te va a hacer tener más interés sexual en ella.
Creo que la pregunta que te debes hacer es, ¿puede tu novia hacer esto para ti? No te preocupes por que sea incómodo proponer tus deseos del juego del control de castidad, es como si la invitaras a un juego de rol con ella. Después de casi 4 años, es bueno poder hablar de cualquier cosa que pertenezca a vuestra vida sexual y no tienes que sentirte incómodo. Si no os sentís cómodos hablando de esto íntimo, hay algo entre vosotros que no está bien. Podría ser incompatibilidad, o que uno de los dos debe aprender a sincerarse y abrirse un poco más para dar rienda suelta y desarrollar vuestra intimidad en la relación romántica que tengáis.
Sustituir tu mano por la mano de tu novia demasiado a menudo tampoco va a ayudarte a mejorar vuestra intimidad. Creo que actuas muy egoístamente.
¿Has pensado en cómo se siente ella? Si bien es una pista de que tu novia no está por la labor ya que ella se negó con lo del pegging, creo tú también debes abrirte completamente a sus deseos. Eso significa que los dos debéis ser honestos, descriptivos, y explicaros que es lo que os gusta, y buscar un punto en que los dos salgáis ganando. En otras palabras, esto del control de castidad puede ser algo divertido para tí, pero si ella lo encuentra repugnante o que no le ve la gracia, o simplemente no le va, es probable que tengáis un problema de compatibilidad en estos gustos y los dos tengáis que hablar sobre vuestro futuro juntos, y si sigues con ella ya sabes a lo que vas, y ella contigo.  Debes ofrecerle algún incentivo para que a ella le guste controlarte, si no ¿que gana ella?
Si ella prefiere estar con un hombre tradicional, y los gustos sexuales de ella están más en línea con la tuya y ella tal vez también prefiere una personalidad más dominante, entonces ambos os estáis engañando permaneciendo juntos. Es por ello, que diálgo, diálogo, diálogo y buscar un punto de equilibrio que ayude a los dos, y no solo a un miembro de la pareja.