martes, 9 de febrero de 2016

Mi castidad matrimonial

Mi marido tiene 15 años más que yo, y un día dijo que ya no quería follar más. Es probable que nunca follemos de nuevo. Esta negación la tomé con inmensa alegría, que va más allá de la negación del sexo. La tomé como la eliminación de mis necesidades sexuales en mi matrimonio. Mantenemos una buena conexión emocional y él cumple con todos los demás aspectos de mi vida, simplemente vivo de forma completa y totalmente monógama en el aspecto de mi sexualidad. 

Me compró un cinturón de castidad para ayudarme a evitar tentaciones cuando estoy sola en casa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario